EXTINCIÓN DE ESPECIES - FARMSTILL

Desde que hay vida, en la tierra han ocurrido 5 grandes extinciones de especies que, en algún momento, han poblado el planeta. Estas han sucedido naturalmente por la evolución, las especies no han sido capaces de adaptarse a los cambios y han surgido nuevos ejemplares competidores. Esto se conoce también como selección natural.

Hoy en día las extinciones ocurren a un ritmo desmedido, en 100 años, se han destruido especies que naturalmente habrían tardado 10.000 años en desaparecer. Es tanta la magnitud del problema, que se considera que el planeta está entrando en la sexta extinción en masa de la historia, la cual se atribuye al humano y sus actividades dañinas.

Cada especie vive de determinada manera y se conserva siguiendo los cambios de estaciones. Gracias al calentamiento desproporcionado del planeta, estos cambios ocurren a destiempo y perjudican la supervivencia de los animales. La ONG WWF en su informe Planeta Vivo, advierte que el fenómeno del cambio climático está ocurriendo demasiado rápido como para que las especies sean capaces de adaptarse.

Las actividades que causan y aceleran el cambio climático, son las mismas que dejan sin hogar y matan a millones de animales. Prácticas como pesca y caza excesiva, destrucción de hábitats naturales, introducción de especies invasoras, explotación de suelos y contaminación, han causado una aceleración en las tasas de desaparición natural. Aunque cada especie posee motivos específicos, para considerarse en peligro de extinción, la mayor amenaza es la acción despreocupada del humano y sus consecuencias.

Ahora bien ¿qué es la extinción? Es el proceso en el cual desaparecen todos los miembros de una especie o grupo de seres vivos. Es decir, es el término que se utiliza cuando, después de haber realizado búsqueda exhaustiva en el hábitat, se concluye que la especie ha desaparecido en todas partes.

Como resultado de las desapariciones, se genera una pérdida de la biodiversidad, es decir la falta de esos miembros en el hábitat. El problema radica en que, no se saben con exactitud las consecuencias globales que estas extinciones forzadas causan. El daño más evidente es la afectación del sistema donde solían vivir y la coexistencia del resto de los miembros, lo que puede generar un colapso total de dicho sistema. Gracias a esto la naturaleza tiene el trabajo de recuperar su equilibrio ecológico, lo cual necesita mucho tiempo.

Según datos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, aproximadamente 35.500 especies de animales se encuentran en peligro de extinción en la actualidad, que divididos en clases serían: 14% aves, el 40% anfibios, el 33% peces y 26% mamíferos.

Evitar este gran problema supone un reto inmenso, principalmente el humano debe mitigar su impacto y desacelerar sus actos nocivos. Para esto es imprescindible evitar la desforestación, castigar la caza ilegal y el tráfico de especies, crear reservas naturales, así como programas de reproducción y mejora genética. Asimismo es vital la lucha contra la contaminación y el cambio climático.

Conservar la flora y fauna es completamente necesario para continuar la humanidad y tener un planeta habitable. La supervivencia de los seres vivos depende de las acciones en pro del ambiente, que se tomen de ahora en adelante. Es completamente necesaria la educación y comprensión de este problema, así como la gestión de empresas y países para la resolución de tal desafío.